Notas de viaje | Día IV

ANA Karenina, una de las más importantes novelas de la literatura universal, empieza diciendo que todos los matrimonios felices se parecen, pero los infelices lo son cada uno a su manera. Estos dos días que estuve en Bariloche me acordaba de ese comienzo: tal vez Bariloche y Ushuaia se parezcan en las cosas buenas pero se diferencien en las malas. Se me ocurren algunos ejemplos: entre lo más obvio, Bariloche está construida a orillas del Lago Nahuel Huapi; Ushuaia a orillas del Canal de Beagle. En muchas partes el Nahuel Huapi casi no tiene diferencias con el Lago Roca, que queda hacia las afueras de Ushuaia. Son ciudades que van en bajada y en en ambas nieva mucho, dos cosas que me gustan. Pero una diferencia crucial es que, al menos por donde anduvimos nosotros, en Bariloche casi toda la costa está privatizada. Los acaudalados tienen sus cabañitas para alquilar o sus yates anclados en muelles privados que dan al Nahuel Huapi. Por supuesto, hay partes públicas, pero la gran part...