Una página perfecta
Mañana lenta, suave. Me desperté con la intención de leer a Annie Ernaux, un libro titulado “Los años”, pero pasa algo que desde hace mucho me llama la atención: hay un procedimiento literario interesante, aunque lo interesante del procedimiento no significa que sea agradable de leer. Una vez, en un taller literario, el coordinador decía que las artes visuales están mucho más adelantadas que la literatura porque un artista visual experimenta mucho más. Yo decía que una instalación en un museo se puede ver en cinco minutos, en cambio una novela experimental puede requerir horas de lectura muy densa. Piglia anota en sus diarios que Puig tenía un ojo muy inteligente: agarraba un libro, por ejemplo el Ulises de Joyce, hojeaba unas páginas, observaba el procedimiento (lo que le servía para su propia literatura) y lo cerraba. Por un lado, asombro e indignación: ¿no le importaba a Puig lo que pudiera decirle un libro como el Ulises? Además, nunca pero nunca vi que Puig dijera en alguna entrev